En Argentina existen más de 4 millones de hogares con problemas habitacionales. De este universo, 1,3 millones necesitan una vivienda nueva por mala calidad constructiva o alta densidad de ocupantes. Por otro lado 2,6 millones de hogares tienen necesidades de ampliación o mejoras. Es decir, un 66% de las viviendas sufre algún tipo de en términos de calidad: problemas en techos, paredes, cerramientos, acceso a servicio básicos o informalidad en la tenencia.