Con motivo de recordar la denuncia realizada por la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) -en Madrid– en 1998 ante el juez Baltazar Garzón, documentando los asesinatos y desapariciones de compañeros y compañeras del movimiento obrero, se realizó el panel “Fue genocidio”.
Víctor De Gennaro, Marta Maffei y Víctor Mendibil, entre otros, recordaron y coincidieron que “este hecho político marcó rumbos, porque se realizó en un momento en que se legitimaba la flexibilidad laboral. Era muy importante hacer una denuncia así”. (En nuestro país gobernaba Carlos Saúl Menem).
Juan Carlos Camaño, integrante de la delegación que viajó a Madrid, envió una carta dirigida al compañero Víctor Degennaro, en la que recordó a los compañeros Alberto Morlachetti y Alberto Piccinini, también presentes en Madrid (hoy fallecidos) y reivindicó “ese compromiso histórico que asumiéramos hace 25 años ha sido -es- parte de la lucha del campo popular en procura de una sociedad justa y un mundo mejor. Por las y los 30.000, compañeras y compañeros: “Ni olvido ni perdón”.
A lo largo de las intervenciones se mencionaron las graves estadísticas sociales y económicas del presente, y se las relacionó con el plan económico de la dictadura. “Las leyes económicas siguen siendo las mismas”.
Hubo una muestra fotográfica y se recordó el camino recorrido y el trabajo realizado por todo el país documentando las aberraciones cometidas por la dictadura militar. “El negacionismo no es apenas negar el genocidio, es también negar el papel de la clase obrera en la caída de los militares”, sostuvieron.
Por último, se afirmó la idea de que “la dictadura luego del 83 continuó con la masacre, ya que instaló una matriz económica que es un genocidio por planificación de la desigualdad que hoy continuamos padeciendo”.