P- ¿Cuáles son las dificultades que estás atravesando en el plano personal, profesional o laboral en el marco de la pandemia? 

R- Son varios los aspectos y dificultades, en lo personal, el encierro, privarse de ver a los nietos, no poder estar cerca de los padres que están enfermos, estar lejos de los afectos. Es muy difícil.  

En lo profesional, este último año he visto desplomarse una actividad muy linda, que uno lleva adentro, la comunicación. Se fue todo al “diablo”, si me permiten la expresión. Fundamentalmente por lo económico perdí a los auspiciantes que son un apoyo fundamental para los medios sociales e independientes; al no tener ingresos no hay producción, internet, mantenimiento técnico, entrevistas. Yo estoy en Virrey del Pino, cada auspiciante es una familia que padeció los problemas como todas y todos  

Hoy después de 19 años tuvimos que mudarnos a un estudio pequeñito que pude armar en mi casa para seguir sosteniendo la actividad desde internet y las redes sociales, haciendo lo que mejor se pueda para estar comunicados con los vecinos. 

P- ¿Qué opinión te merece la falta de respuesta ante nuestro reclamo con respecto al predio de UTPBA en Moreno? 

R- Se está repitiendo en toda la Argentina. Fuimos enseñados a tener algo con sacrificio, pero hoy -en está etapa- no se valora el esfuerzo por tener algo. La Utpba y los compañeros obtuvimos el predio en Moreno, y hoy no lo tenemos porque está usurpado. Se fomenta obtener cosas sin esfuerzo. No nos ampara la justicia. Estamos a la deriva.   

La usurpación de nuestro predio en Moreno se repite por todos lados.