Ni siquiera él mismo se presentó a defenderse, desoyendo la convocatoria de la UTPBA a participar de la Asamblea Extraordinaria del 21 de abril pasado a hacer su descargo frente a las acusaciones que le hiciera la mayoría del gremio, tras intentar, una y otra vez, la intervención de nuestra entidad y la eliminación del padrón de afiliadas y afiliados de más de 2.500 compañeras y compañeros.
Las distintas manifestaciones contra el personaje en cuestión –un tal Mariano Suárez- se venían haciendo desde hace largo tiempo y la Asamblea General, por unanimidad, lo expulsó del gremio.
La misma Asamblea reclamó, además, que todos los que atacaron a la UTPBA con injurias, mentiras y distintas agresiones, también sean expulsados. “La impunidad no será eterna”.