Fue
secuestrado a la salida del diario El
Cronista Comercial, en donde había trabajado hasta hacia unos días.
Llegó hasta la redacción, ubicada en el centro de la ciudad de Buenos Aires,
para despedirse de sus compañeros y retirar algunos objetos personales. El “Negro” Demarchi había
sido delegado del diario y candidato a secretario adjunto en una de las listas
-la Naranja- para las elecciones de conducción de la Asociación de Periodistas de Buenos Aires, APBA, en 1974.
Dichos comicios no se realizaron porque la organización fue intervenida, un
anticipo de lo que sucedería con todas las expresiones gremiales durante la
dictadura militar.
Desde entonces, participó como delegado de los trabajadores de prensa ante
distintas instancias organizacionales a nivel nacional, en donde compartió
camino junto a dirigentes como Agustín
Tosco, René Salamanca y Raimundo Ongaro, entre otros.
Escribió generalmente sobre temas sindicales, que él mismo vivió en asambleas y
conquistas memorables de aquella época. Fue un incansable batallador por los
derechos de los trabajadores y muchos compañeros del gremio lo recuerdan como
un verdadero ejemplo de entrega hacia los demás.
Al momento
de desaparecer, Héctor Demarchi
trabajaba para el Canal 13 de México
y preparaba su participación en el 8vo Congreso de la Organización Internacional de Periodistas (OIP), que tuvo lugar en
1976 en Helsinki.
Demarchi iba a cumplir con el propósito de denunciar la gravísima situación que
padecía el país y, particularmente, los trabajadores de prensa.
Secuestrado en agosto de 1976.