P- ¿Cuáles son las dificultades que estás atravesando en el plano personal, profesional o laboral en el marco de la pandemia?
R- Y decir que fue fácil, es cómo no registrar la pandemia. No tener una comunicación directa con los hijos, nieto/as, amigos/as y compañeros/as -y en mi caso con mis clientes- es algo que me fue difícil. Claro, y como toda adversidad, nos volvemos creativos, y mediando en parte la tecnología, traté de estar más cerca y esbozar una sonrisa y darle una caricia al alma. No quedaba otro camino. Debíamos cumplir con el control sanitario, para sí y para el conjunto.
P-¿Qué opinión te merece la falta de respuesta ante nuestro reclamo con respecto al predio de UTPBA en Moreno?
R- Un lugar de recreación, disfrutar de sus asaditos, de sus quinchos, de la pileta y de la comunión de periodistas y comunicadores sociales en un lugar común y de esparcimiento individual y familiar, fruto del esfuerzo mancomunado de un gremio y sus afiliados.
Resulta difícil creer que las autoridades no consideren lo sucedido y, además, que no den respuesta. Todos los gremios ofrecen a sus afiliados un lugar dónde reencontrarse y compartir. ¿Porque no la Unión de Trabajadores de Prensa de Buenos Aires? La lucha continúa, y la esperanza, de que se haga justicia, no la debemos perder.