2 abril, 2020

Más de tres mil casos entre dengue y sarampión

Por estas horas, América Latina no sólo enfrenta la epidemia del coronavirus como en casi todo el mundo, sino que también padece dengue y sarampión, enfermedades estas estrechamente ligadas a las pobreza estructural.

En Argentina, según el último informe epidemiológico del Ministerio de Salud, ya son 2.942 los casos confirmados y probables para dengue, con seis fallecidos.

Mientras que son 158 los casos de sarampión, de los cuales 49 fueron detectados en 2020: 9 son importados y 40 de origen desconocido.

Cabe destacar que el año pasado tres millones de latinoamericanos sufrieron esta infección, con 1500 muertes. Según los datos de la OPS, Brasil acumula el 70% de los casos registrados y en México, Honduras, Guatemala, Nicaragua y El Salvador la cantidad de afectados se multiplica entre tres y diez veces. En Honduras el 17% de los enfermos sufren el dengue hemorrágico y el 66% de los muertos son niños.

Vale decir que esta enfermedad –  como muchas otras – está estrechamente ligada a la pobreza estructural. Falta de cloacas, malas condiciones del alcantarillado y deficiencias severas en los servicios de salud producen el escenario adecuado para la propagación de este mosquito y multiplican la amenaza en toda América Latina. Sobre todo –pero no únicamente- el dengue ataca las precarias viviendas de los cinturones de miseria en las grandes ciudades.

“El hambre es una emergencia diaria para millones de personas”

La FAO y el Programa Mundial de Alimentos (PMA) emitieron un comunicado el cual advierte: “cinco focos en el mundo enfrentan una hambruna extrema y corren riesgo de inanición y muerte en los próximos meses”.

Récord de personas desplazadas

123,2 millones de seres humanos fueron desplazados en el mundo durante 2024. Esta cifra se convirtió en la más alta registrada en una década, según informó en su último reporte la agencia de la ONU para los refugiados (ACNUR).

OMS: “La emergencia climática ya nos está matando”

La Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió por las consecuencias del calentamiento global y aseguró que la humanidad padece sus consecuencias con la vida misma.